De un par de días para acá, he recibido mensajes de chicos en Panamá, Honduras y Guatemala, tanto a mi correo y por twitter, quienes en busca de información sobre la beca Walton, dieron con mi blog.
Se trata de jóvenes que se postularon para la beca y fueron entrevistados, pero que no han recibido noticias.
Viendo esto, le escribí a uno de los directores, quien me informó que los ganadores en todos los países ya fueron notificados, y que ellos les hicieron la salvedad a los muchachos de que solo notificarían a los ganadores.
Walter, el chico que me escribió desde Honduras, por lo menos me dice que fue entrevistado por los directores. He recibido correos y llamadas de chicos que dicen que alguien los llamó para notificarles sobre la beca y querían confirmar dónde eran las entrevistas, pero cuando hablas con ellos, en realidad era que a penas se habían enterado de la existencia del programa solo faltando dos días para el cierre de la convocatoria…
Entre el correo que envió y los comentarios en este blog, Walter cuenta que se sentía muy seguro de que lo iban a llamar, sin embargo, el señor que dirige la beca en la universidad a la que fui era un poco más seco que los otros dos directores que le entrevistaron.
El día que me entrevistaron los directores hace ya ocho años, yo estaba conversando con una chica que había conocido en la entrevista anterior y con el chico de la recepción del hotel, quien bailaba en el mismo grupo folklórico que yo. Ahí fue cuando justamente este señor del que habla Walter bajó a buscarme y nos vio en animada charla. Hasta el sol de hoy, podría jurar que este señor pensó que le estaba coqueteando al tipo… Si tan solo supiera que es gay…
Este señor en particular ha tenido que ser más desconfiado, ya que hemos tenido chascos horribles con algunos estudiantes. Pocos, pero bastante serios.
Hemos tenido casos de chicos que llegan a la u y a la semana o al año deciden que no quieren estar lejos de su casa. En otra ocasión, escogieron a una chica que después del primer semestre regresó a su casa para Navidad y estando en su país notificó que ese semestre no iba a regresar porque le habían diagnosticado una enfermedad y resulta que ella ya estaba embarazada cuando viajó en agosto, y otro chico que expulsaron por que lo agarraron teniendo relaciones en un carro. Estos dos últimos casos ocurrieron mientras yo fui estudiante.
Parte de la desición también se basa en si el estudiante podrá adaptarse a alguna universidad en particular. Se trata de tres universidades cristianas en Arkansas, que es un estado muy conservador, además que el aceptar la beca implica no tomar ni fumar. Para los estudiantes de Harding, la u a la que yo fui, esto no solo es parte del contrato de la beca, sino parte del reglamento de la misma universidad y el infringir estas reglas es causal de expulsión.
Para los directores es una responsabilidad muy grande escoger ya que por un lado, ellos serán responsables de uno por los siguientes cuatro años y también, que de la selección de estudiantes depende que la beca siga existiendo.
El número de becas que dan por país depende de la población y de la cantidad de estudiantes que se gradúa el año anterior, (el número se reduce si alguno se retira o lo expulsan), además que la Fundación Walton no va a querer continuar con el programa si los estudiantes dejan de regresar a sus países después de graduados.
Todo el proceso de reclutamiento y selección de la beca en cada país es realizado por exalumnos del programa que queremos que otros muchachos tengan la misma oportunidad que nosotros. El ciclo completo, desde el envío de cartas, visitas a las escuelas, gestión de medios, recepción de paquetes y entrevistas toma de 3-4 meses cada año, por lo que no consideramos prudente tener oficinas. Es por esto que levantamos presencia en Facebook y abrimos una cuenta de correo para la comunicación de la beca en Panamá.
Esto lo hacemos de forma voluntaria, y con mucho cariño, pero también tenemos trabajos de mucha responsabilidad y familias que atender. En mi caso, tengo un bebé de 3 meses que requiere toda mi atención y un trabajo que como comunicadora es un sueño, pero muy absorvente.
Debo admitir que muchas veces no entiendo los criterios de estos señores. Se supone que la fórmula mágica para un posible becado Walton es que no tenga un ingreso familiar alto, que sea buen estudiante, y que su inglés le permita por lo menos defenderse en sus clases. Sin embargo, usualmente encontramos estudiantes con dos de estas tres cualidades.
Se supone que una de las prioridades de la beca es ofrecerle una formación académica a estudiantes que de otra forma no tendrían acceso a ella, ni siquiera en su propio país. El ejemplo que siempre se me viene a la mente es la de un compañero que tuve que creció en un vertedero en Guatemala, pero así mismo como escogieron a mi compañero, también tuve una compañera Walton cuyos dos primos, hijos de un prominente político hondureño, fueron a la misma universidad que nosotros.
Cada año recibimos hasta 300 paquetes con documentos y nos es imposible llamar a cada uno de los chicos y decirles «Hola Fulanito. Recibimos tus papeles pero lamento informarte que no calificas. Chau».
Entiendo a estos muchachos, en especial por la incertidumbre de no saber porqué no te llamaron, pero hemos pasado por situaciones en que padres y estudiantes se han comunicado con nosotros al ver que no fueron llamados, y yo la verdad no tengo corazón para decirle a alguien que no seleccionamos a su hijo porque gana demasiado.
Hemos optado también por no dar nuestros números de teléfono y mantener en medida de lo posible la comunicación a través de e-mail, ya que de lo contrario, no tendríamos descando lo que dure la convocatoria…